«La experiencia con mi operador de telefonía está siendo realmente frustrante. Desde el primer mes, me he encontrado con facturas erróneas que no coinciden con lo acordado.

Pero lo peor ha sido la calidad de internet, que ha sido pésima. Mi hijo, un ávido jugador de la PlayStation, se ha quejado frecuentemente de la lentitud de la conexión y de las caídas constantes.

Después de pasar el período de promoción, me aplicaron una subida de precio del doble sin previo aviso ni explicación alguna, me sentí engañado y estafado.

Cuando he intentado resolver los problemas, he encontrado que la atención al cliente es muy deficiente, con tiempos de espera excesivamente largos y respuestas vagas e insuficientes.

Me he quedado con una sensación de impotencia e indefensión total»